Entidades, fantasmas, espíritus, demonios, espíritus desencarnados... tienen muchos nombres. Reconocidos en numerosas religiones, culturas, naciones y familias, la noción de sentir una presencia en casa es demasiado común. Millones de personas relatan el sentimiento de sentir a un ser querido fallecido a su alrededor. El hecho es que la gran mayoría de personas tienen alguna experiencia personal o historia familiar que les permite corroborar este tipo de apariciones.
Sin embargo, otros viven atormentados silenciosamente por una presencia dominante, que no ven pero presienten y por la que se pueden sentir observados. De este tipo de presencias son de las que hablaremos en este post.
